La muerte de Isolda
Sobre el fondo de la música de Warner (la
obra de “Tristán e Isolda”) se desarrolla una historia de amor y de recuerdos.
Al concluir el primer acto de la obra,
padilla descansaba en su butaca del teatro , fija sus ojos en una hermosa mujer joven, pálida
(Inés) que se encuentra en un palco junto a su esposo, un opulento
almacenero, vulgar, mucho mayor que Inés.
Cuando
se inicia el segundo acto, padilla seguía buscándola con la mirada, pero se da
cuenta que el vecino de su butaca también la está mirando y saluda a la mujer
(Inés) .Aquí padilla, nos describe a Esteban como un hombre de más de treinta y
cinco años, barba rubia y ojos azules de mirada clara y un poco dura.
Transcurría
la mitad del segundo acto de “Tristán e Isolda”, Esteban e Inés se miraban fija
e insistentemente, aislados del mundo, según el relato de padilla.
Antes de
concluir el tercer acto, Esteban sale al pasillo, y el palco donde se
encontraba Inés estaba vacío .padilla
piensa que entre ellos pasa algo.
Al cabo
de unos días se encuentran (Padilla y Esteban),
se conocen a solo pocos momentos que zarpe el barco en el que Esteban se
iría para nunca volver, empiezan a conversar y Esteban le dice que le recuerda
mucho a el cuando era joven, también le señala a Padilla que quizá pudo juzgar
mal lo que vio esa noche en el teatro.
Luego
Esteban empieza a confesarse y a decir
de Inés que la conoció 10 años y 6 meses fueron novios hasta que dejo de
quererla y recordaba también que el ambiente social de ellos era diferente que ella
quería poseer su nombre también
recordaba que él tenía relaciones sexuales con otras muchachas y por eso su pasión por ella se apagó y él
estaba consiente cuanto ella lo amaba.
Le
relata el termino relación, entregándole
detalles de esos momentos a Padilla, reconoce que fue cruel e hiriente y que en
un instante enlodo con palabras hirientes al amor más puro que hombre alguno
haya sentido sobre si , mientras ella
lloraba inconsolablemente ;en ese instante se da cuenta de su error , pero fue
demasiado tarde ….acababa de perder con Inés .Salió inmediatamente de Buenos
Aires . Volvió ocho años después, Inés ya se había casado apenas seis meses
después que rompió con ella. Se volvió a
ir y regreso hace un mes, ya tranquilo y
en paz.
Pero fue
al verla nuevamente, esa noche en el teatro ,que Esteban sintió su alma
sangrante por haberla perdido ,como si no hubiera pasado un día de esos diez
años .La música de Warger lo envolvió de tal manera esa noche , que no pudo soportarlo
y abandono su butaca ,mientras se dirigió al palco donde se encontraba Inés
tendida en el diván del antepalco deshecha en llanto .Esteban la llamo clamando su nombre e Inés con sollozos
incontrolados le dijo: “No , no es demasiado tarde” .
Eso sería
todo y espero que te vaya bien
Vocabulario:
Butaca: Asiento blando de brazos, con el
respaldo inclinado hacia atrás
Palco: En los teatros, departamento, en forma
de balcón, en el que hay varios asientos
Arbitrio: Facultad de resolver o decidir: actuar
según su propio arbitrio
Súbita: Repentino, inesperado: idea súbita;
cambio súbito
Inequívoca: Que no admite duda
Menester: Falta o necesidad de algo: es menester
que digas la verdad
Alarido: Grito
de guerra de los moros al entrar en batalla
Inverosímiles: Que no tiene apariencia de verdad: un
relato inverosímil
Dogma: Punto fundamental de doctrina, en
religión o en filosofía
Lívido: Cárdeno, que tira a morado, personas
extremadamente pálidas
Crispado: Contraer repentina y pasajeramente los músculos
de una parte del cuerpo
Oscilación: Desplazarse alternativamente un cuerpo
en un sentido y en otro de su posición
de equilibrio